
El sistema antibloqueo de frenos, conocido como ABS (las siglas corresponden a Antilock Bracking System) es uno de los sistemas de seguridad activa más importantes del coche. De hecho, aunque empezó ofreciéndose como opción en modelos de alta gama a mediados de los años ´80, desde 2003 existe una normativa de la Unión Europea para que sea equipamiento de serie en los coches nuevos.
El ABS no se encarga de impedir el bloqueo de las ruedas en la frenada, lo que no sólo mejora la eficacia de la misma , sobre todo cuando las condiciones de adherencia son desfavorables, sino que también ofrece un margen extra de maniobra. Y es que si las ruedas traseras se bloquean, el coche hará un “trompo”, y si se bloquean las delanteras, el coche se queda sin dirección. De esta forma, en una frenada de emergencia, por ejemplo, el conductor de un coche con ABS puede aplicar la máxima presión al pedal del freno, e incluso mantendrá la posibilidad de esquivar un obstáculo en el último momento.
Pero, ¿Cómo impide el ABS que se bloqueen las ruedas en una frenada? Cuando pisas el pedal del freno, el líquido de frenos del circuito hidráulico presiona laspastillas de freno contra los discos. Si se ejerce demasiada presión sobre el pedal,las ruedas llegarían a bloquearse. En un coche con ABS existe un sensor de giro yuna válvula en cada rueda. Si se detecta que la rueda va a bloquear, el sistema es capaz de disminuir la presión en el circuito hidráulico individualmente sobre cada rueda, de forma que llegue la máxima presión de frenado posible sin que ésta deje de girar.
Cuando el ABS interviene el proceso se repite de forma muy rápida para evitar el bloqueo (las válvulas pueden abrirse y cerrarse hasta casi 20 veces por segundo); el conductor lo nota porque se produce una pequeña vibración en el pedal del freno, y también puede iluminarse un testigo de advertencia en la instrumentación que indica que el ABS está actuando.
Vídeo sobre el funcionamiento del sistema ABS